2 mar 2015

Por qué los niños se despiertan por la noche

La mayoría de los insectos, reptiles y peces tienen cientos de hijos, con la esperanza de que alguno sobreviva. Las aves y mamíferos, en cambio, suelen tener pocos hijos, pero los cuidan para que sobrevivan la mayoría. 

Los mamíferos, por definición, necesitan mamar, y por lo tanto ningún recién nacido puede sobrevivir sin su madre. Pero, según la especie, también necesitan a su madre para muchas otras cosas. En algunas especies, el recién nacido es capaz de caminar en pocos minutos y seguir a su madre (¿quien no recuerda aquella escena encantadora en Bambi?). Eso ocurre sobre todo en los grandes herbíboros, como ovejas, vacas o ciervos. Estos animales viven en grupos que devoran rápidamente la hierba de una zona, y tienen que desplazarse cada día a un nuevo prado. Es necesario que la cría pueda seguir a su madre en estos desplazamientos. 

Los pequeños herbívoros, como los conejos, pueden esconder a sus crías en una madriguera, salir a comer y volver varias veces al día para darles el pecho. Sus crías no caminan nada más nacer, sino que son indefensas durante los primeros días. Lo mismo ocurre con la mayoría de los carnívoros, como los gatos, perros o leones. La madre sale a cazar dejando a sus indefensas crías escondidas.


Las crías no nacen sabiendo, sino que aprenden, y esto es importante, porque les permite una mayor flexibilidad. 

Una conducta innata es siempre igual, una conducta aprendida puede adaptarse mejor a las condiciones del entorno, y perfeccionarse con la práctica. 

La primera vez que un ciervo ve a un lobo, debe salir corriendo. Si no lo hace bien, morirá, y por lo tanto no podrá aprender a hacerlo mejor. Por eso es lógico que los ciervos sepan correr en cuanto nacen. Los lobos sí que pueden aprender: la primera vez el ciervo se les escapa, pero con la práctica consiguen atraparlo. Los juegos de su infancia constituyen un aprendizaje para su vida adulta. 

Los primates (los monos) parece ser que descendemos de animales que caminaban nada más nacer. Pero, al vivir en los árboles, tuvimos que hacer cambios. Bambi resbala varias veces antes de ponerse en pie; y eso no tiene importancia en el suelo. Pero, subido en una rama, un resbalón puede ser fatal. De modo que los monitos van todo el día colgados de su madre, hasta que son capaces de ir solos perfectamente, sin el menor error. Pero es el monito el que se cuelga, activamente, de su madre, agarrándose con fuerza a su pelo con manos y pies, y al pezón con su boca (cinco puntos de anclaje). La madre puede correr de rama en rama, sin preocuparse de sujetar al niño.

 ¿Se atrevería usted a ir de rama en rama, o simplemente caminando por la calle, con su bebé a cuestas pero sin sujetarlo, ni con los brazos ni con ningún paño o correa? Claro que no. Para que un niño sea capaz de colgarse de su madre y sujetarse solo durante largo rato, probablemente debería tener al menos dos años. Ya nuestros primos más cercanos, los chimpancés, son incapaces de sujetarse solos al principio, y su madre tiene que abrazarlos, pero sólo durante las dos primeras semanas. 

La diferencia con nuestros hijos es abismal. Y para caminar (no para dar cuatro pasos a nuestro alrededor, como hacen al año, sino caminar de verdad, para seguirnos cuando vamos de compras, sin llorar y sin que tengamos que girar la cabeza cada segundo a ver si vienen o no), nuestros hijos tardan al menos tres o cuatro años. Hasta los 12 o 14 años, es prácticamente imposible que los niños sobrevivan solos; y en la práctica, procuramos no dejarles solos hasta los 18 o 28 años. 

Los seres humanos son los mamíferos que durante más tiempo necesitan a sus padres, y dejan muy atrás al segundo clasificado. Probablemente, esto se debe en parte a nuestra gran inteligencia. Como decíamos de los lobos, la conducta debe ser aprendida para ser inteligente, pues la conducta innata es puramente automática. Nuestros hijos tienen que aprender más que ningún otro mamífero, y por lo tanto tienen que nacer sabiendo menos. 

¿Y qué tiene todo esto que ver con que los niños se despierten? Ya llega, ya llega. Ahora mismo veremos que tiene que ver todo lo anterior con la conducta de su propio hijo. Empezábamos diciendo que hay crías que necesitan estar todo el rato con su madre, encima de ella o siguiéndola a poca distancia, y otras que se quedan escondidas, en un nido o madriguera, esperando a que su madre vuelva. Para saber a qué tipo pertenece un animal, basta con observar cómo se comporta una cría cuando su madre se va. Los que tienen que estar siempre juntos se ponen inmediatamente a llorar, y lloran y lloran (o hacen el ruido equivalente en su especie) hasta que su madre vuelve. 

Una cría de ganso, por ejemplo, aunque tenga agua y comida cerca, no come ni bebe, sino que sólo llora hasta que sus padres vuelven, o hasta la muerte. Sin sus padres, de todos modos no tardaría en morir, por lo que debe agotar toda su energía en llorar para que vuelvan. Y debe empezar a llorar inmediatamente, en cuanto se separa, porque cuanto más tarde en hacerlo más lejos estará, y por tanto más difícil será que le oiga. En cambio, un conejito o un gatito, cuando su madre se va, permanecen muy quietos y callados. Esa separación es normal en su especie, y si se pusieran a llorar podrían atraer a otros animales, lo que siempre es peligroso.

 ¿Cómo reacciona su hijo cuando usted le deja en la cuna y se aleja? Si, como hacían los míos, "se pone a llorar como si le matasen", quiere decir que, en nuestra especie, lo normal es que los niños estén continuamente, las 24 horas, en contacto con su madre. Y no es difícil imaginar que hace 50.000 años, cuando no teníamos casas, ni ropa, ni muebles, separarse de su madre significaba la muerte. 
¿Se imagina a un bebé desnudo en el campo, al aire libre, expuesto al sol, a la lluvia, al viento y a las alimañas, sólo durante ocho horas, mientras su madre "trabaja" recogiendo frutas y raíces? Ni siquiera una hora podría sobrevivir en esas circunstancias. En tiempos de nuestros antepasados, los bebés estaban las 24 horas en brazos, y sólo se separaban de su madre para estar unos momentos en brazos de su padre, su abuela o sus hermanos. Y cuando empezaban a caminar lo hacían alrededor de su madre, y tanto la madre como el niño se miraban continuamente, y se avisaban mutuamente cuando veían que el otro se despistaba. 

Hoy en día, cuando usted deja a su hijo en la cuna, sabe que no corre ningún peligro. no pasará frío, ni calor, ni se mojará, ni se lo comerá un lobo. Sabe que usted está a pocos metros, y le oirá si pasa algo y vendrá en seguida (o, si usted ha salido de casa, sabe que otra persona ha quedado de guardia, escuchando a pocos metros). Pero su hijo no sabe todo eso. Nuestros niños, cuando nacen, son exactamente iguales a los que nacían hace 50.000 años. Por si acaso, a la más mínima separación, lloran como si usted se hubiera ido para siempre. Más adelante, cuando empiece a comprender dónde está usted, cuándo volverá y quién le cuida mientras tanto, empezará a tolerar las separaciones con más tranquilidad. Pero aún faltan unos años. 

Casi toda la conducta del bebé, que aún no ha aprendido nada, es instintiva, idéntica a la de nuestros remotos antepasados. Y la conducta instintiva de la madre también tiende a aparecer, aquí y allá, despuntando entre nuestras gruesas capas de cultura y educación. Por eso, cuando vaya al parque con su hijo de tres años, ambos se comportarán de forma muy similar a sus antepasados. Usted mirará casi todo el rato a su hijo, y le avisará cuando se despiste ("ven aquí" "no vayas tan lejos"). Su hijo también le mirará con frecuencia, y si la ve despistada o hablando con otras personas se pondrá nervioso, incluso se enfadará, e intentará llamar su atención ("mira, Mamá, mira" "mira qué hago" "mira qué he encontrado"...) 

Llegamos a la noche. Es un periodo particularmente delicado, porque si el niño duerme ocho horas, y la madre se ha ido durante este tiempo, cuando despierte puede estar a siete horas de marcha, y por más que llore no la oirá. Hay que montar la guardia. Durante las primeras semanas, nuestros hijos están tan completamente indefensos que es su madre la que debe encargarse de mantener el contacto. 
En aquellas raras culturas (como la nuestra) en que madre e hijo no duermen juntos, la separación hace que la madre esté muy intranquila, y sienta la necesidad imperiosa de ir a ver a su hijo cada cierto tiempo. ¿Qué madre no se ha acercado a la cuna "para ver si respira"? Claro que sabe que está respirando, claro que sabe que no le pasa nada, claro que sabe que su marido se reirá de ella por haber ido... pero no puede evitarlo, tiene que ir. 

A medida que el niño crece, se va haciendo más independiente. Eso no significa que pase más tiempo solo, o que haga las cosas sin ayuda, porque el ser humano es un animal social, y no es normal que esté solo. Para un ser humano, la soledad no es independencia, sino abandono. La independencia consiste en ser capaces de vivir en comunidad, expresando nuestras necesidades para conseguir la ayuda de otros, y ofreciendo nuestra ayuda para satisfacer las necesidades de los demás. Ahora ya no hace falta que usted vaya a comprobar si su hijo respira o no; ¡él se lo dirá! Como se está haciendo independiente, será él quien monte guardia. Se despertará más o menos cada hora y media o dos horas, y buscará a su madre. Si su madre está al lado, la olerá, la tocará, sentirá su calor, tal vez mame un poco, y se volverá a dormir en seguida. Si su madre no está, se pondrá a llorar hasta que venga. Si mamá viene en seguida, se calmará rápidamente. Si tarda en venir, costará mucho tranquilizarle; intentará mantenerse despierto, como medida de seguridad, no sea que mamá se vuelva a perder. 

Es aquí donde la vida real no coincide con los libros, porque a las madres les han dicho que, a medida que su hijo crezca, cada vez dormirá más horas seguidas. Y muchas se encuentran con la sorpresa de que es todo lo contrario. No es "insomnio infantil", no son "malos hábitos", simplemente es una conducta normal de los niños durante los primeros años. Una conducta que desaparecerá por sí sola, no con "educación" ni "entrenamiento", sino porque el niño se hará mayor y dejará de necesitar la presencia continua de su madre. 

Si cada vez que su hijo llora usted acude, le está alentando a ser independiente, es decir, a expresar sus necesidades a otras personas y a considerar que "lo normal" es que le atiendan. Eso le ayudará a ser un adulto seguro de sí mismo e integrado en la sociedad. Si cuando su hijo llora usted le deja llorar, le está enseñando que sus necesidades no son realmente importantes, y que otras personas "más sabias y poderosas" que él pueden decidir mejor que él mismo lo que le conviene y lo que no. Se hace más dependiente, porque depende de los caprichos de los demás y no se cree lo suficientemente importante para merecer que le hagan caso. Una infancia feliz en un tesoro que dura para siempre, que nadie podrá jamás arrebatarte. 

La infancia de su hijo está ahora en sus manos.

Escrito por Carlos González, autor de "Mi niño no me come" y "Bésame mucho". Ed. Temas de Hoy

También puedes revisar:
Los peligros de dejar llorar al bebé
Cinco cosas que no se deben hacer a los bebés

SIGUE A MAMÁS GALLINA EN LAS REDES SOCIALES:

  Síguenos en Facebook Síguenos en Instagram Síguenos en Twitter

31 comentarios:

  1. Gracias por su valiosa información y sus fundAmentos

    ResponderEliminar
  2. Muy buen artículo . Hay errores involuntarios como este que relata el artículo que algunas madres cometemos debido a malos hábitos heredados por generaciones . Me gustaría que escribieran acerca de este otro mito de las abuelas :" no mantener mucho a los bebes en brazos porque se mal acostumbran a estar cargados todo el tiempo " . Pienso que lo mejor es abrazarlos todo lo que puedas mientras sean bebes y se dejen . Luego ya no querrán hacerlo .

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola! Gracias por tu mensaje. En efecto tenemos un artículo que te interesará mucho, búscalo como: "¿Es cierto eso de que los bebés se malacostumbran a los brazos?" está dentro de la pestaña: TEMAS SELECTOS.
      Un abrazo!

      Eliminar
  3. GRACIAS!!! Mi hija tiene 10 meses y medio y tiene el mismo comprotamiento que describres, quiere estar las 24h conmigo y por la noche despierta mucho para engancharse al pecho.
    Comenzaba a preocuparme que no fuera una conducta normal, ya que todo el mundo se permite el lujo de opinar y oyes de todo jejeje! Pero ya me quedo mas tranquila sabiendo que estoy haciendolo bien.
    Duerme con nosotros desde recien nacida practicamente, me hicieron cesárea y los primeros dias por el dolor no pude dormir con ella. Ademas como quiere estar conmigo las 24h suelo hacer porteo de forma muy frecuente. JEJEJE!
    DE NUEVO GRACIAS Y MIL GRACIAS

    ResponderEliminar
  4. Excelente artículo, Me siento más tranquila.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Qué bueno Carlina, esa es la idea sentirnos más tranquilas, saludos!

      Eliminar
  5. Muy buen articulo! Es bueno saber que uno esta haciendo las cosas bien aunque para este tiempo moderno me digan que estoy loca. Seguire siendo mama gallina :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias Stephanie! Confiemos en nuestras convicciones, saludos!

      Eliminar
  6. Pues mi hijo debe ser muy raro porque desde los dos meses duerme del tirón más de 8 horas. Alguna noche se ha despertado pero muy pocas, me he levantado y al ratito se ha dormido. Según mi pediatra está muy espabilado y es un niño que se ríe enseguida. Come estupendamente y únicamente reclama atención cuando está despierto. Estoy encantada con él.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Paula, cada niño es diferente. La mayoría despierta bastante durante la noche pero si el tuyo no lo hace, enhorabuena!

      Eliminar
  7. Muy buen escrito! Me estoy leyendo el libro de "Bésame mucho" y me gusta! un saludo

    ResponderEliminar
  8. Enhorabuena por el artículo. Yo tuve la pena de no poder dar pecho, pero soy de las que los tienen al brazo todo lo que puedo y no me arrepiento. Me encanta besar y abrazarlos y decirles lo mucho que les quiero. Mi hija con 3 años duerme de un tirón, si la duermo al brazo y me encanta, pero es un angelito. El pequeño con 13,meses se despierta un par de veces mínimo para comer y también se duerme al brazo, pero es darle el bibe y quedarse frito. Yo estoy totalmente de acuerdo, los niños necesitan sentirse queridos y protegidos y eso les da confianza en ellos mismos.
    Aprovechemos los momentos con nuestros pequeños, crecen muy rápido y cuando nos descuidemos tienen 14 años y no quieren saber nada de nosotras. Un saludo a todas y todos

    ResponderEliminar
  9. Muy buen articulo, ameno y agradable de leer. Lo único que les recomiendo es cambiar el formato de lectura pues se hace complicado leer tanto texto junto.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por tu comentario, el formato ha sido modificado para una mejor lectura. Saludos cordiales.

      Eliminar
  10. entonces la pregunta sería, hasta que edad promedio es necesario atenderlo siempre al niño? o que indicadores se manifiestan que revelan es hora de aprender a no necesitar tanto de mamá?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola! A los niños se les atiende siempre que nos necesiten. Ellos mismos a medida que crecen buscarán su independencia y dejar de necesitarnos tanto pero esto es algo que no se da de manera forzada, ni con "técnicas", es algo que se da en el desarrollo natural de todo individuo. Sino mira a un adolescente, ¿tú crees que se deja besar por su mamá frente a sus amigos? Saludos cordiales.

      Eliminar
  11. gracias, yo tambien pensaba que se despierte por ratos en la noche, no era normal o que busque la teta no estaba bien, ahora estoy mas tranquila, excelente articulo mil gracias!!!!!!

    ResponderEliminar
  12. Gracias por el artículo! Esta muy bueno! De todas formas quisiera preguntar lo siguiente, mi cuñada practica colecho, mi sobrina ya va a cumplir casi 2 años, y aun así no duerme tranquila (duermen en una cama de dos plazas, por lo que espacio hay), se queja y se despierta casi igual que recién nacido. ¿Qué es lo que podría estar ocurriendo? Gracias un abrazo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola! Gracias por tu mensaje! La mayoría de los niños duermen de corrido a partir de los 3 años, algunos antes otros después. Mientras tanto el colecho es una buena opción para no estar tan cansado como para levantarse de la cama y ir hasta otro cuarto. También me gustaría saber, la mamá trabaja? Algunas veces cuando la mamá trabajo, los niños intentan "compensar" su ausencia despertando mucho por las noches. Si fuera así el colecho sigue siendo la mejor opción. Un abrazo!

      Eliminar
  13. simplemente hermoso, natural e instintivo gracias x el texto me encanto

    ResponderEliminar
  14. Yo duermo (aun) con mi hijo (que ya tiene casi tres) en las noches, con los ojos cerrados (quiza de forma inconciente), alarga las manos o sube los pies y me toca...y luego se voltea y sigue durmiendo... Siempre he encontrado esto muy curioso, ya que es como que se asegurara de que estoy ahi...
    Ahora, al fin lo entiendo..

    ResponderEliminar
  15. Me encantó, significa q estoy haciendo bien mi labor de mamá. Gracias! !!

    ResponderEliminar
  16. Totalmente desacuerdo yo pienso que si acudimos cada vez que lloran estamos criando niños que saben que obtendran todo a traves del llanto y se produce una dependencia extrema y por lo tanto una madre extremadamente agotada y cansada que por no dormir bien al dia siguiente no tiene mucha energia o paciencia. Me pregunto si el autor de este articulo sabe lo que es dar pecho cada dos horas y no dormir bien.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Estimada Marcela, gracias por tu mensaje que me permite desmitificar eso de que malcriamos a los bebés cuando respondemos a su llanto. La única forma de comunicación que tienen los bebés es precisamente el llanto, por lo tanto ignorarlo es muy peligroso. Por medio del llanto los bebés nos comunican diversas necesidades, dolores e incomodidades, te imaginas si alguna vez tu bebé en una de las tantas veces que despierta por la noche, empieza a llorar y tu decides ignorarlo porque ya es la tercera vez que te despierta? Ahora imagínate si su llanto es porque está empezando una reacción alérgica que puede cerrar sus vías respiratorias? ¿Cómo estás segura que su llanto es por malcriadez o porque de verdad te necesita? y si te equivocas?.
      Por otro lado un bebé es incapaz de llorar por querer "manipular" o algo parecido. Cognitivamente no han alcanzado el desarrollo suficiente para hacerlo. Yo he dado de lactar no sólo cada dos horas y media, al principio fue cada hora y sí me sentía terriblemente agotada porque también me creí eso de que cada bebé debe dormir en su cama. Desde el momento que puse a mi bebé a mi lado, él se despierta muchísimo menos y yo estoy mucho más descansada. Ojo, hay guías para practicar un colecho seguro.
      Un saludo.

      Eliminar
  17. Intento cargar a mi bebe de tres meses todo lo k puedo pero mi espalda me abandona!! Me encanto el articulo..gracias me siento mama gallina

    ResponderEliminar
  18. Hola, creo que realmente soy mama gallina, ya que mi hija tiene 7 años y aun debo quedarme con ella hasta que se duerma, luego me voy a mi cama y aprox. a las 3 o 4 de la mañana despierta y me llama para que me acueste con ella jajaja aunque a veces no quiera hacerlo, para que duerma sola, igual termino en su cama...igual espero que algun dia se le pase, no creo que quiera dormir conmigo a los 15 años jaajaja

    ResponderEliminar
  19. Gracias por compartir tu experiencia con todos Vanesa, llevo unos días sin pegar ojo porque cada vez que me acuesto lloran desconsoladamente y estoy que no puedo más

    ResponderEliminar
  20. Hola. Genial artículo!

    Si se me permite aportar algo que puede que le sirva a alguien...

    A nosotros nos está sirviendo de mucho un libro que se llama MI CAMITA

    No se quién es el autor, pero el libro sale el primero buscando en Google.

    Leyéndole este librito, además lo pide cada noche, nuestro niño de dos años por primera vez se está quedando en su cama. Increible.

    Por si la referencia le sirve a alguien.

    Un abrazo!




    ResponderEliminar
  21. Cuando eres una madre novata no hay nada peor que oír llorar a tu bebé por la noche y no saber qué hacer porque no se puede expresar y no sabes qué hacer. Gracias, magnífico post, lo tendré en cuenta

    ResponderEliminar